Hoy en día, Cuba padece las consecuencias de la crisis económica global, una crisis que azota especialmente a la agricultura, un sector que mantiene insuficiencias y desafíos esenciales. En este escenario, CERAI desarrolla en colaboración con la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP), la Filial Universitaria Municipal (FUM) de la Universidad de Granma y la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), el proyecto ‘Fortalecimiento de las potencialidades territoriales para el desarrollo local sostenible y participativo del municipio de Cauto Cristo’. El fin último: fortalecer las capacidades productivas y las competencias técnico-profesionales de campesinas y campesinos de cuatro cooperativas clave, por su potencial productivo y de impacto en el territorio.
En la isla, la crisis económica global se ha traducido en 2023 en el incremento de precios de insumos y el alimento animal hasta un 167%. Al mismo tiempo, la migración del campo a la ciudad vacía la tierra cubana, tan solo el 15% de la población vive en áreas rurales. Y a todo esto hay que sumar que el país solo ha podido adquirir el 40% de combustible, el 4% de fertilizantes y el 20% de alimento animal requerido porque su capacidad de acceso al financiamiento es mínima.
Para paliar esta situación, el Estado continúa trabajando estratégicamente en la plataforma nacional para alcanzar una plena seguridad alimentaria soberana; un paraguas para el desarrollo agroalimentario de Cuba y base para las proyecciones productivas en el ámbito socioeconómico y cultural, abarcando desde la transformación y comercialización hasta el consumidor final.
En este sentido, uno de los esfuerzos realizados es el fortalecimiento de las competencias institucionales a nivel municipal y provincial; porque para que se consolide el desarrollo local es necesario descentralizar muchos procesos y que los territorios ganen en autonomía. “Sólo se alcanzará la soberanía y seguridad alimentarias si se avanza junto al campesinado en la producción suficiente y sostenible de alimentos diversos, nutritivos y de calidad; reduciendo la dependencia de medios e insumos externos y con responsabilidad medioambiental”, destaca Francisco Cacheira, técnico expatriado en Cuba. Es por ello que es indispensable formar adecuadamente a productoras y productores, apostar por el extensionismo e interrelacionar programas gubernamentales de manera que, se posibiliten estudios municipales para comprender mejor la demanda y trabajar en torno a ella.
CERAI acompaña este esfuerzo desde hace 15 años, ejecutando proyectos de colaboración como el iniciado en la provincia oriental de Granma, ‘Fortalecimiento de las potencialidades territoriales para el desarrollo local sostenible y participativo del municipio de Cauto Cristo’; que es posible gracias a la Consejería de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática de la Generalitat Valenciana.
La iniciativa, que gestionará un monto total de 331.000,00€, se implementará junto a la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños -ANAP- en beneficio de 639 socios campesinos (117 mujeres y 522 hombres) de cuatro cooperativas agropecuarias; centrándose en los siguientes ejes y acciones estratégicas:
- Desarrollo de metodologías de coordinación y gobernanza participativa con enfoque de género en desarrollo; con el objetivo de afianzar el trabajo en red, asentar el aprendizaje colaborativo, así como, la multiplicación de experiencias.
- Impulso al emprendimiento de las mujeres campesinas en el desarrollo socioproductivo de las cooperativas; mediante el acceso al trabajo agropecuario, su participación activa y la toma de decisiones en el conjunto de ámbitos del desarrollo humano, en consonancia con el Programa Nacional para el Adelanto de las Mujeres (PAM) de Cuba. Para ello, la entidad contará con el apoyo del profesorado de la Universidad de Granma desde su Filial Municipal en Cauto Cristo que, capacitará a instituciones municipales y juntas directivas de las cooperativas para incorporar la perspectiva de género en todos sus principios rectores y estrategias de acción.
- Intensificación de la capacidad del campesinado para aumentar y diversificar sus producciones; promoviendo la protección y conservación de la fertilidad de los suelos. En consecuencia, CERAI contribuirá a reforzar la maquinaria agrícola del campo cubano, desarrollará tecnologías de riego eficientes, apoyará la conservación de semillas, creará redes de facilitadores y capacitará al campesinado en formas de producción agropecuarias sostenibles con el medioambiente.
- Aumento de la capacidad de comercialización de las producciones y servicios de las cooperativas para dinamizar el desarrollo local del municipio mediante la mejora del transporte desde el espacio de acopio hasta el mercado; la optimización de la producción local de piensos criollos para atenuar las deficiencias pecuarias; la apuesta por maximizar la conservación y la transformación de productos agrícolas más diversificados para ofrecer a la población. Esto gracias a las mini industrias establecidas en las cooperativas y la dinamización del trabajo de la red local de prestación de servicios estratégicos entre los actores implicados.
Todas estas acciones convergen en la necesidad de desarrollar una agricultura menos dependiente de insumos externos y más eficiente con el uso de los recursos humanos y materiales disponibles en el campo cubano. CERAI mantiene esta línea estratégica planteada por el Estado cubano desde la década de los 80. La clave la ofrece Cacheira a través de sus palabras. “Consideramos que la agricultura orgánica y la agroecología no es sólo un cambio de modelo tecnológico, sino una transformación de la concepción agrícola. Trabajamos por un proceso que implica un viraje de la conciencia social hacia la agricultura y el conocimiento de los ciclos naturales para su uso racional y acorde al contexto”.