A finales de julio queda visto para sentencia el juicio por la segunda pieza del denominado Caso Blasco, en el cual se acusa al exconseller Rafel Blasco y al empresario Cesar Augusto Tauroni de dirigir presuntamente una trama de empresas y falsas ONGD para desviar fondos destinados a la cooperación internacional entre los años 2008 y 2011.
En este segundo juicio, la Coordinadora Valenciana de ONGD, como acusación popular, ha pedido para el empresario Tauroni 22 años de prisión, 16 para Blasco y 14 años para el funcionario Marc Llinares, que entonces era el jefe del Área de Cooperación Internacional. La CVONGD considera probado el delito de asociación ilícita, por el que Blasco no fue condenado en la primera pieza, y que le podría suponer, junto con el resto de delitos de los que se le acusa, hasta 16 años de prisión.
A juicio de la Coordinadora, los acuerdos alcanzados entre la Fiscalía, el exconseller y el resto de principales acusados no garantizan la devolución de los fondos destinados a los países empobrecidos que fueron expoliados, ni suponen la justicia efectiva necesaria para la dignidad de la sociedad valenciana.
Precisamente para exigir limpieza ante este grave caso de corrupción, desde la CVONGD y el Observatori Ciutadà contra la Corrupció se convocó el pasado 18 de julio a la ciudadanía valenciana y a las entidades sociales a un acto de protesta frente a la Ciudad de la Justicia bajo el lema “Caso Blasco: seguimos limpiando la corrupción”. En este acto se escenificó, con la colaboración del grupo teatral ‘La Mar Salá’, que la justicia no debe ser ciega, muda y sorda, y que la ciudadanía no va a dejar de defender limpieza frente a los casos de corrupción.
La performance reunió a más de una treintena de personas ante la puerta de entrada del edificio donde se está celebrando el juicio. Con gritos de “el poble valencià contra la corrupció” y “on estan els diners de la cooperació?”, las personas concentradas exigieron que se garantice en la sentencia la devolución de los más de 4 millones de euros desviados de 23 proyectos de cooperación con comunidades empobrecidas de 11 países, incluidos las afectadas por el devastador terremoto que sufrió Haití en 2010.
Con esta concentración se ha pedido una sentencia proporcionada con la gravedad y la inmoralidad de los delitos cometidos. “Creemos que está quedando acreditado, por las declaraciones de los testigos, y por las pruebas documentales que están en la causa, que Blasco y Tauroni crearon y dirigieron una banda criminal para manipular los procedimientos para la concesión y control de fondos a proyectos de cooperación, y desviarlos para su propio lucro con la compra, como mínimo, de yates y apartamentos de lujo, que se sepa”, ha explicado Lourdes Mirón, presidenta de la Coordinadora Valenciana de ONGD.
Por su parte, Carles Xavier López, portavoz de la campaña #JusticiaCasoBlasco de la Coordinadora Valenciana de ONGD, ha rechazado los acuerdos alcanzados por la Fiscalía con los principales acusados, dado que no garantizan la devolución de los fondos robados. Frente a ello, ha exigido “que el tribunal no se ciña a esos pactos y falle de acuerdo con los principios de justicia y responsabilidad que rigen nuestra sociedad”.
La CVONGD ha mostrado en las últimas semanas su preocupación por el desarrollo del juicio y un temido cierre en falso de la parte más gruesa del Caso Blasco, lo cual podría lanzar a la sociedad el mensaje de que la corrupción puede salir gratis. Por otro lado, la CVONGD también ha querido mostrar su agradecimiento a la ciudadanía valenciana por el apoyo recibido a través de la campaña de recaudación de fondos para hacer frente a los gastos judiciales que conlleva ejercer la acusación particular. Con todo, este caso ya se ha convertido en un ejemplo de lucha ciudadana contra la corrupción y en defensa de la solidaridad y la cooperación internacional para el desarrollo.